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Es hermoso
esa época de la vida en que hemos rebasado la mediana edad y entramos en un
periodo que puede acarrear angustias, problemas físicos y emocionales y en
algunos casos problemas económicos. Las personas
que están en esta etapa de su vida nos aportan una mayor experiencia, una visión
y un sentimiento diferente de la vida, si sabemos aprovecharlos serán útiles
para nuestro desarrollo personal.
Las familias deben
tener más comunicación con las personas de la tercera edad. Entre algunas cosas
que debemos tener en cuenta están: Chequearlos con su médico de cabecera y así
se previene cualquier enfermedad, llevarlos a caminar para los problemas de
circulación, mantener el peso ideal es importante y mantener una alimentación
sana.
Las
autoridades competentes deben crear actividades recreativas para los ancianos.
La sociedad tiene un alto grado de responsabilidad para los miembros de la
tercera edad.
La
predisposición a la angustia que siente la persona mayor debido a sus
limitaciones físicas puede ser aliviado si se encuentra rodeado de una familia
comprensiva, que le dedique tiempo y cariño, esto lo hará sentir mejor.
Una terapia o
medicina efectiva que puede recibir un anciano es visitar una iglesia de su
preferencia, de esta forma se sentirá parte de una
comunidad que lo incluye en sus actividades y los hará sentirse útiles.
Dra. Nuris Carpio, Psicóloga
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